Los fosfatos son productos formados por la sustitución de
parte o todo el hidrógeno del ácido fosfórico por metales.
Según el número de átomos de hidrógeno sustituidos, el
compuesto obtenido se define como fosfato primario,
secundario o terciario. Los fosfatos tienen multitud de
aplicaciones tanto domésticas como industriales.
Na3PO4: Saponificación de grasas,
decapante de pinturas y mezclado con NaClO, se utiliza en
maquinas de lavado.
Na2HPO4: Fabricación de quesos y
aditivo para el jamón (evita pérdida de agua).
NaH2PO4: Tratamiento anticorrosión
previo a la pintura de una chapa.
Ca(H2PO4)2: En panadería
como levadura artificial mezclado con NaHCO3.
CaHPO4: Como abrasivo en pastas de dientes.
Los fosfatos contenidos en los detergentes domésticos
contribuyen a la contaminación del agua, ya que son un medio
nutriente para las algas. Si crecieran en exceso,
dificultarían la vida acuática de lagos y ríos por la falta
del oxígeno. (Eutrofización)